Después de un examen de conciencia todo parece indicar que aprendiendo de los errores (que la llevaron a la quiebra), retoma la marcha en un trayecto que es toda una realidad acompañado de un nombre in-novador el Chevrolet Volt.
GM destinó un sólo lugar para presentar el nuevo Chevrolet Volt "hibrido" en un pequeño, pero efectivo circuito en el Dodger Stadium en Los Ángeles, California.
El prototipo de pre-producción o IVER (Integration Vehicle Engineering Real Prototype) número 80, con los que se han recorrido miles de kms, pero que es el primero que se permite conducir por la prensa especializada y del que, finalmente, pudimos probar en uso el sistema de extensión de autonomía eléctrica mediante el encendido del motor de combustión interna.
El ingeniero en jefe creador del vehiculo, Andrew Farah, comento:
“Este lanzamiento de GM podría ser la gran maravilla tecnológica de los últimos tiempos. No sólo es un eléctrico sorprendente, sino que representa todo un proceso de reingeniería en todas y cada una de las áreas de la empresa para colocarse nuevamente a la cabeza del mundo motor. En otras palabras, el Volt es sin duda uno de los mejores GM que hemos podido crear, y pocos modelos de este tipo ha logrado la empresa”
El Volt comparte la plataforma global Delta II, con las capacidades de la nueva tecnología Voltec. Donde lograron integrar le mecánica con la tecnología, pues junto con el Volt llegan diversos sistemas de alta eficiencia en el consumo, como luces de diodos, aire acondicionado de bajo consumo al igual que toda la electrónica del coche.
La posición de manejo es cómoda, fácil de encontrar, vamos a una altura media respecto al piso y la visibilidad es buena, a pesar de la línea alta en la quinta puerta o posterior que responden a una necesidad aerodinámica y de espacio, para no comprometer la altura a las plazas traseras y ofrecer una cajuela decente que supera los 400 litros (aunque se pueden abatir los asientos y mejorarla significativamente).
Su propulsor es tan normal como el de cualquier otro auto de este tipo, con una unidad grande al lado derecho que controla toda la electrónica (ECU) y debajo del propulsor de gasolina el eléctrico conectado directamente al eje delantero.
Presionando un botón que enciende el auto. Se encuentra el ambiente hi-tech que envuelve el “inicio” de los sistemas. Sólo hay dos pantallas, una al centro, touch screen para controlar audio, algunos ajustes del auto y el aire acondicionado. Los botones son sensibles al tacto, como en un telefono movil, y no hace falta presionar mucho.
Para el conductor se agrega otra pantalla más de LCD en donde podemos ver todas las funciones que uno quiera del auto, pero principalmente velocidad, rangos de autonomía en modo eléctrico y la total empleando el rango extendido, así como los galones de combustible utilizados y qué tipo de motor estamos utilizando, porque cuando el térmico enciende es prácticamente imperceptible desde dentro. También se incluye una esfera que se mueve verticalmente para indicar el manejo ideal obteniendo la mayor eficiencia, o si nos estamos pasando o estamos consiguiendo buena recuperación de la frenada o desaceleración.
La palanca, al estilo de una nave espacial, se coloca en el modo D y listo, sin ruidos, basta presionar el pedal controlado electrónicamente (by-wire) para que los 121 CV del auto nos permitan rodar cómodamente. Sin ruidos extraños “y eso que estamos en un preproducción”. Destacan un par de botones en la consola central: una hoja o un “Sport”, el primero, todavía no terminado, mesura la respuesta del auto, con el segundo, tenemos 140 CV para conseguir en menos de 9 segundos el 0 a 100 km/h. La dirección, asistida eléctricamente es muy precisa y fiel. Sabemos perfectamente en dónde se encuentran nuestras ruedas, calzadas con neumáticos de baja resistencia especialmente desarrolladas por Goodyear para GM y que reciben el nombre de Fuel MaxTire.
Estamos ante puras sensaciones preestablecidas electrónicamente pero que generan confianza. Los frenos, también by-wire, olvidan la imprecisión de los que montaba el Cruze. Si además le sumamos un bastidor confiable y un rolling realmente controlado, se olvida por completo la creencia de que un auto eléctrico se maneja diferente. El Volt es incluso emocionante.
Durante la prueba de manejo apretando el pedal, logramos acabarnos la carga de las baterías. El motor encendió automáticamente, sin muchas revoluciones de por medio que van en aumento según le exigimos al auto. Funciona de maravilla y si reducimos la marcha se comprueba que manda suficiente energía como para cargar eficientemente las pilas e incluso apagarse sin muchas vibraciones, aunque Andrew Farah, nos aseguró que “eso se va a mejorar”.
El precio es uno de sus problemas, cerca de los 40 mil dólares y Andrew lo entiende; “sabemos que no es barato, por ese dinero te puedes comprar un Mercedes, pero es el primer paso en esta tecnología y sabemos que mucha gente querrá apoyarla. Además, tendremos incentivos fiscales de hasta 7,500 dólares, por lo que ya más gente lo tomará como una opción interesante”.
El Volt es un auto, con todas las características actuales, con ABS, EBD, controles de tracción y estabilidad, seis bolsas de aire, GPS, equipo eléctrico, en fin, un vehículo silencioso, confortable, con buenas dosis de torque, que cualquiera podría conducir sin exigirle cambios en su comportamiento típico de manejo. Que toma lo mejor de dos mundos para colocarse como una de las cartas fuertes en este camino de transición.
Parece que las promesas, estan siendo cumplidas y GM tiene masss que listo el Chevrolet Volt 2011, un auto eléctrico de autonomía extendida que tiene todo el potencial para convertirse en el top of mind de la movilidad de las generaciones venideras.
G M anunció además que su auto recargable eléctrico rendirá hasta 230 millas por galón en tráfico urbano, con lo que cuadruplicaría la eficiencia del híbrido Toyota Prius. GM dijo que el Volt saldrá a la venta a finales del 2010.
Publicado por:
Jesus Agustin
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