05 abril 2010

Rapier SL-C Superlight Coupé

Rapier Automotive nos presenta otro super-auto basado en la idea de: quitar peso antes de dar masss CV de potencia como los Caterham o el famoso Ariel Atom. El cual ha nombrado Rapier SL-C Superlight Coupé.


Pero en realidad cuenta con varias cosas “súper”: es súper-ligero, súper-deportivo y súper-potente. El SL-C se puede describir como un biplaza de cabina central, presentando un frente imponente y una parte trasera baja con un importante aleron sobredimensionado, que nos hace pensar en un auto para darlo todo en la pista.


La propuesta mecánica se basa directamente en los motores que existen en los Corvette: 6.2 V8 LS3 de 480 CV, 7.0 V8 LS7 de 505 CV y 6.2 V8 LS9 de 640 CV. Hasta el último de estos “caballos” es trasladado a las dos super-anchas ruedas traseras a través de un cambio manual de seis marchas. Si hacemos la suma “tracción trasera” masss “cambio manual” masss “640 CV” obtenemos todo un juguetito para descargar adrenalina.


Pero antes de continuar mencionando las excepcionales prestaciones del SL-C Superlight Coupé hay que conocer sobre su construcción. El super-auto esta realizado prácticamente a mano con materiales muy ligeros: el aluminio, que forma el chasis monocasco, y diversos materiales compuestos que dan vida a la carrocería.


El peso total que resulta de la aplicación de los materiales mencionados nos otorga un resultado de 1.100 kilogramos en vacío, menos que prácticamente cualquier compacto que se pueda adquirir actualmente.


Equipando al SL-C Superlight Coupé con el motor masss potente, según Rapier Automotive la velocidad máxima lograda se sitúa en los 355 km/h mientras que el 0 a 100 km/h lo consigue en poco masss de 3.0 segundos. Unos discos de freno de hasta 33 cm de diámetro y unas pinzas de seis pistones se encargan de detener a esta furia con seguridad.


Para conocer masss sobre todo lo que pede hacerse con el SL-C Superlight Coupe se necesita solicitar a Rapier Automotive una prueba completa en pista, incluso con la idea de realizar ajustes al gusto del comprador.


Posteriormente y una vez que se haya uno decidido a gastarse 179.000 dólares en él se puede personalizar de arriba a abajo, desde los colores del exterior a los colores y el diseño del interior.

Publicado por:
Emilio R. Covelo

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