Al Defender si se le puede llamar un autentico “off-road”, que ahora se aligera un poco con una dosis de fibra de carbono que le intercambian en los protectores delantero y trasero pintados de un color negro mate.
De la misma forma van decorados los arcos de rueda, la tapa del motor y la mitad superior de la cabina. Igual que en otros trabajos de Aznom el Defender lleva una dualidad de colores blanco y negro con un toque de rojo en los laterales.
Parece que nunca nos hubiéramos imaginado a un todo-terreno tan rudo, que pudiera incorporar tantos materiales de nueva tecnologia.
El habitáculo continua con la misma temática de color incluyendo un volante en fibra de carbono y un tapizado realizado en piel naranja y Alcantara gris, incorporando asientos “Sparco” de tipo deportivo y otros accesorios interesantes. Aquí se acaba la posible armonía de colores, cuestión que para el día a día puede resultar un poco cansado este tipo de colores en el interior.
Aznom para esta ocasión se une con Romeo Ferraris, para subir la potencia al propulsor turbodiésel 2.4 TD4, que pasa de 122 a 152 CV y consigue 75 Nm de par máximo, hasta un total de 435 Nm. Sin duda para un 4x4 como éste, un alto par-motor es necesario para poder ejercer su trabajo de verdadero todo-terreno y sortear obstáculos que una SUV no podría.
No es muy habitual que un “off-road” puro como éste se prepare como un turismo de altas prestaciones, pero es bueno que existan masss opciones. La estética no debe estar peleada con las aptitudes todo-terreno y masss cuando son modificaciones que no le impiden su verdadero propósito.
Publicado por:
Jesus Agustin
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