Aplicando sus conocimientos en mejoras tanto para el sistema de propulsión del CTS-V, como en su exterior. El motor V8 sobrealimentado de 6.2 litros de serie que incorpora este Cadillac, ya cuenta con 564 CV de potencia, lo que para Cam Shaft parece poco, elevándolo a 630 CV.
Mediante un nuevo compresor de “Wait4Me”, que aumento el impulso de presion hasta 0.4 bar. Además de instalar un filtro de aire de alto flujo, reacondiciona el software de la ECU para obtener este importante salto de caballos de fuerza.
El resultado es un super-auto que es tan potente como novedoso. Una combinación notable de estilo y sustancia, todo en un paquete diferente. El Cadillac CTS-V by Cam Shaft se presenta con una pintura blanco mate, contrastada con negro mate para detalles como la parrilla y las tomas de aire frontal entre otras 25 piezas que de serie se plantean en cromo, incluyendo las nuevas ruedas de aleación de 18 pulgadas.
Cada una de las modificaciones viene con su etiqueta de precio. Para el acabado blanco mate de la pintura exterior el costo es de 2.972 US dólares (€ 2.250). El repintado de las 25 piezas de cromo en negro mate 4.294 US dólares (€ 3.250), y por último, el kit de rendimiento que incluye el compresor 5,000 US dólares (3.800 €).
El Cadillac CTS-V es la respuesta de Estados Unidos contra el BMW M5 y el Mercedes E63 AMG, aunque a menudo mucha gente podría rechazar el CTS-V debido a que los alemanes son considerados como dos de los mejores sedanes deportivos del mundo. Sin embargo, subestimar la super-auto americano es no saber de lo que se trata este Cadillac.
Publicado por:
Emilio R. Covelo
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