Presentando durante este año el Volvo V40 como un digno sucesor (aunque con cinco puertas), superando en casi todos los aspectos al compacto sueco. El Volvo C30 nacía como una alternativa diferente dentro del segmento de autos-compactos, identificándose dentro de una apuesta fresca y original que no tenía nada que ver con prácticamente ningún otro compacto-premium, aunque jamás gozó de las ventas de sus rivales.
Pero esto se convirtió una virtud masss del C30, la exclusividad del “auto-diferente” que en su interior escondía cualidades muy interesantes. Por poner un ejemplo ilustrativo, las ventas del C30 a lo largo de todo 2012 ni tan siquiera han llegado a superar las ventas del último mes de rivales como el Audi A3 o el BMW Serie 1. Pese a su reciente lanzamiento el Volvo V40 ya ha logrado superar en ventas en 2012 al C30 y con creces.
Sin embargo extrañaremos la deportividad del Volvo C30, con su peculiar estética diferenciada en ese abundante portón trasero y por supuesto su carrocería de tres puertas. Mientras el Volvo V40 ha apostado masss por lo práctico y el espacio del que aspira para posicionarse como un gran compacto o un monovolumen, frente al toque retro pero concepción juvenil del C30, que por cierto contaba con un chasis con un aplomo que muchos rivales ya hubieran querido tener.
Dejando opciones de gasolina que parten de un C30 2.0F de 145 CV y el tope de gama, un Volvo C30 T5 de 230 CV que únicamente está disponible con cambio automático y un precio base, con equipamiento bastante completo “Business Edition”, desde 32.069€. Para poder conseguir ahora un Volvo V40 desde 23.533€ también con ese mismo motor. Por lo que es difícil justificar la adquisición de un C30 que prácticamente se ha visto superado por el nuevo modelo en otros aspectos.
Publicado por:
Jesus Agustin
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